Mi amadísima hija, Mi Corazón anhela por el mundo y todos
los que viven en él y les prometo que haré todo lo posible por unirlos a todos ustedes, hijos de Dios, dentro de Mi Corazón.
Amo a cada hombre, mujer y niño, sin importar quiénes son – ya sea que sean poderosos, ricos, influyentes, humildes, pobres o solo simples personas, viviendo vidas ordinarias. Todos ustedes fueron elegidos para nacer por Mi Padre, Quien los creó. Cada alma tiene un propósito y cada uno de ustedes es un querido hijo de Dios.
Aquellos de entre ustedes quienes sufren enormemente y quienes pueden haber perdido toda esperanza en la vida, sepan que están en Mi Corazón y que siento su dolor profundamente. Sufro dentro de ustedes. Nunca deben perder la esperanza, porque tengo un lugar para ustedes en Mi Paraíso. Cuando pierden la esperanza, están dándole la espalda a su futuro, el cual está lleno de Mi Luz. Este futuro es Mi Regalo para ustedes y todo es Mío. Quitaré su preocupación. Solo llámenme y digan: "Jesús, quita mi terrible dolor y sufrimiento y déjame sentir Tu Amor." Y levantaré su pesada carga al instante.
Cuando se sientan vacíos y crean que nadie realmente los ama, deben saber que Yo estoy ahí a su lado, porque Yo siempre los amaré, no importa cuán lejos se hayan desviado. Cuando crean que no tienen nada por qué vivir, entonces sepan que Mi Nuevo Paraíso les dará la Vida Eterna. Pero deben perseverar con su sufrimiento en esta vida primero. Sin embargo, aliviaré su sufrimiento y todo lo que tienen que hacer es pedirme que lo haga.
Muchos de ustedes se sienten despreciados, no amados, fracasados, insatisfechos y de poca utilidad. Se sienten así porque el mundo está obsesionado con el supuesto éxito y ambiciones. Solo los pocos, la élite, parecen alcanzar tales grandes alturas. Las presiones creadas por los medios de comunicación del mundo para celebrar la riqueza y la belleza solo sirven para destruir la confianza del hombre ordinario. No es necesario impresionar a otros. No es necesario o deseable impresionarme a Mí con su supuesto éxito. Trabajen duro, por supuesto. Utilicen los talentos dados a ustedes por Dios, pero utilícenlos con el fin de servir a otros y por el bien de todos. Pero sepan esto. Es el débil, el humilde de espíritu y aquellos con un simple amor por Mí, Jesucristo, a quienes Yo levantaré a la mayor gloria en Mi Reino. Aquellos quienes sufren ahora nunca sufrirán de nuevo en Mi Nuevo Paraíso.
Mi promesa de venir a reunirlos a todos ustedes será cumplida durante Mi Segunda Venida. Ansíen este día con anhelo y alegría, ya que no está lejos y entonces les traeré los Dones de amor, alegría, felicidad y Vida Eterna. Perseveren y acérquense a Mí. Yo estoy con ustedes. Nunca los abandonaré, pero no deben separarse de Mí porque si lo hacen, estarán perdidos para Mí. Vengan, recuesten su cabeza en Mi Hombro. Déjenme consolarlos. Déjenme poner fin a su dolor. Déjenme que les seque sus lágrimas. Déjenme darles Mi Paz.
Les concedo una Bendición especial ahora. Tómenla. Acepten Mi Mano y todo estará bien. Los amo.
Su Jesús
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